Cada año que pasa los fabricantes de camiones de transporte invierten más en la reducción del nivel de ruido de los vehículos. Los motores de combustión se van a ir sustituyendo poco a poco por baterías eléctricas contribuyendo a la disminución de la contaminación acústica.
Camión de transporte de mercancías más silencioso
La conciencia de los fabricantes de camiones sobre el problema del ruido no ha parado de crecer en los últimos años. Conseguir un transporte de mercancías más silencioso se ha convertido en uno de los principales logros a conseguir para las próximas décadas. Como decíamos anteriormente, ya no es solo algo que las administraciones quieran conseguir con sus políticas de circulación, sino también la conciencia que proviene de los propios fabricantes.
¿Qué ofrece un camión eléctrico?
El reparto de mercancías silenciosa conlleva consigo una serie de ventajas para la persona que conduce el camión. Aquí te explicamos los puntos más importantes:
El sonido de la carga
Los camiones de transporte que utilizan baterías eléctricas son muy silenciosos. A veces cuesta saber cuándo se encuentran en marcha. Para los grandes vehículos que circulan por las carreteras, reducir el ruido al acercarse a núcleos urbanos es una ventaja. Los conductores dejan de trabajar en un entorno con mucho ruido generado por el motor en combustión y el capó deja de emitir ese calor que hace subir los grados en verano en el exterior del vehículo.
Una conducción más tranquila y segura
La ausencia de ruido dentro de la cabina cambia la experiencia de conducir un camión de transporte de mercancías. El profesional al volante mejora su atención y su aumenta su concentración en la carretera y en el entorno. Esto conlleva a dos repercusiones directas:
- se reduce la siniestralidad
- mejora la salud de los transportistas
A todo ello sumar que el camionero podrá escuchar con antelación los avisos de un camión de bomberos o de una ambulancia, contribuyendo a la seguridad vial.
Futuro prometedor para el reparto urbano
La utilización de vehículos eléctricos de reparto puede beneficiar de forma contundente todos los servicios de distribución en núcleos urbanos. Las operaciones de carga y descarga se podrán efectuar en horarios hasta ahora vetados al ruido. A todo ello hay que añadir que estos vehículos eléctricos no emiten de partículas nocivas a la atmósfera. Esto permitirá evitar las restricciones al tráfico cada vez más presentes en las grandes urbes.