Tal como hemos visto en otros artículos, cuidar del medio ambiente es uno de los grandesretos del transporte de mercancías y, muy especialmente, del transporte por carretera. Gracias a la implantación de nuevos combustibles, la aplicación de la tecnología a la logística y la consecuente mejora de ésta y otros muchos factores que abordaremos a continuación se está consiguiendo, cada vez más, cuidar el medio ambiente.
El reto de cuidar del medio ambiente
La Unión Europea ha marcado como objetivo en materia de transporte y medio amiente reducir las emisiones contaminantes hasta cerca del 70% en el año 2050. En este reto tiene una papel muy importa el sector del transporte de mercancías porque, en la actualidad, es uno de los que tiene un índice más alto de emisiones contaminantes.
El CO2, necesario para la combustión, es una de las principales causas del conocido como efecto invernadero. En España, según el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), el 66% de las emisiones de gases que recoge el Protocolo de Kioto corresponden a emisiones de CO2.
Y de éstas, según la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA), el transporte terrestre de mercancías es el responsable de entre el 40% y el 50% . Esta situación, obviamente, preocupa a las autoridades competentes y se está trabajando para revertirla.
Medidas para cuidar el medio ambiente desde el sector del transporte terrestre de mercancías
Para poder reducir el daño medioambiental de este sector se deben tomar algunas de las medidas que enumeramos a continuación:
Circular con la capacidad de carga llena. De esta manera, que en la actualidad, gracias a sistemas como el grupaje, circulan menos camiones y, obviamente, el impacto negativo es muy inferior que si circulan cuatro camiones al 25% de carga.
Menor consumo de combustible. Los fabricantes de vehículos, neumáticos y accesorios trabajan cada vez en esta línea. Los camiones y grandes vehículos usan neumáticos que realizan una menor fricción con el suelo e incorporan una mejor aerodinámica, lo que puede suponer una reducción del consumo de hasta un 10%.
Gestionar las flotas adecuadamente. Los sistemas avanzados de gestión de flotas, tal como hemos visto en otros artículos, pueden identificar las rutas más rápidas e, incluso, optimizarlas hasta el punto de anticiparse a retenciones u otros imprevistos en el recorrido y plantear alternativas a los conductores. También registran todos los datos del recorrido para que se puedan sacar conclusiones y mejorar a partir de los errores cometidos.
Además, mediante tecnologías como el GPS y el Wifi pueden seleccionar el vehículo que está más cercano para que acuda, siempre que tenga disponibilidad, a realizar el servicio demandado.
Distribución en horario nocturno. La distribución de mercancías entre las 12 de la noche y las 6 de la mañana, favorece, muy especialmente en las grandes ciudades y centros logísticos ,que los vehículos de carga puedan trabajar a una velocidad media superior y que la distancia recorrida por los vehículos sea menor. Gracias a la ausencia de tráfico, con la distribución el tiempo de descarga se puede reducir hasta un 25% según diferentes estudios.
Combustibles alternativos. Actualmente los fabricantes están trabajando muy intensamente en la creación de nuevos modelos de combustible más eficientes. Esto hace que, por ejemplo, los carburantes diésel –debemos tener en cuenta que inmensa mayoría de los camiones que se dedican al transporte de mercancías son de gasoil- sean cada vez más elaborados y menos contaminantes.
Además, también están surgiendo alternativas como los camiones eléctricos, que vimos en un artículo anterior, y los de gas natural. La utilización de estos combustibles se pretende que reduzcan en un 80% las partículas de dióxido de nitrógeno.
Carreteras verdes. Estas carretas, construidas con la finalidad de causar el menor daño posible en el entorno y que la circulación por éstas sea tenga el menor impacto medioambiental posible.