El transporte internacional de mercancías es un sector estratégico: creador de empleo y de ingresos y facilitador del comercio. Sin embargo, también es un sector que juega un papel clave en la conservación de los recursos y la reducción del calentamiento global.
De hecho, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), en 2012, el sector del transporte representó cerca del 64% del consumo final del petróleo a nivel mundial. De este modo, se responsabilizó del 25% de las emisiones mundiales de dióxido de carbono provenientes del consumo de combustibles.
Esta necesidad se hace todavía más urgente si tenemos en cuenta las cifras estimadas de crecimiento del sector. Según la OCDE, el transporte internacional se habrá multiplicado por 4,3 en 2050. Además, dado el rápido crecimiento de potencias como China e India el transporte internacional de mercancías por carretera, el más contaminante, habrá aumentado un 230% en 2050.
Por ello, desde hace unos años, se habla de la sostenibilidad en el transporte de mercancías como un reto de obligado cumplimiento. En este sentido, la Unión Europea está determinada a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 40% de aquí a 2030 respecto a los niveles de 1990. España, como miembro de la UE, desea contribuir a tal objetivo.
El programa Horizonte 2020 tiene como uno de los temas más importantes el desarrollo de un nuevo sistema de transporte inteligente, ecológico e integrado. Con este objetivo se van desarrollando acciones en torno a las siguientes áreas:
- Un transporte eficiente en el uso de los recursos y que respeta el medio ambiente.
- Mejor movilidad, menor congestión, mayor seguridad.
- Liderazgo mundial para la industria europea del transporte.
- Investigación socioeconómica y de comportamiento y actividades de prospectiva para la formulación de políticas.
¿Cómo colaborar con un transporte de mercancías sostenible?
La Comisión de Comercio y de Desarrollo de Naciones Unidas determinó las principales medidas que pueden adoptar las empresas de transporte internacional de mercancías:
- Evitar el transporte ineficiente y los viajes sin carga.
- Adoptar modos de transporte más limpios, sustituyendo el transporte por carretera por el ferroviario o reducir el transporte aéreo y potenciar el transporte marítimo. De hecho, el impacto del transporte en el medio ambiente se reduciría un 4,5% si solo el 50% de las mercancías que hoy en día se transportan por carretera pasaran a las redes ferroviarias.
- Utilizar fuentes de combustible más limpias, así como tamaños de vehículos y rutas más apropiadas.
- Instalar las unidades de producción cerca de los lugares de mayor concentración de clientes o de los lugares de suministro con más demanda.
- Mejorar la eficiencia energética. Vehículos más aerodinámicos, neumáticos anchos para reducir el peso y la resistencia a la rodadura, reducir tiempos de espera y reducir la velocidad.