La insularidad es una cualidad de todos los territorios que están rodeados por mar, es decir, de las islas. Esas características radican en el grado de aislamiento que sufren, dada la dificultad, por ejemplo, para la llegada de transportes y otro tipo de comunicaciones que solo pueden realizarse por vía marítima o aérea. Intentamos desgranar cómo es el día a día del transporte marítimo en zonas aquejadas de triple insularidad.
¿Qué es la triple insularidad?
La insularidad puede darse en primer grado, en segundo o en tercero. En el primer caso existe una única barrera de comunicación. Suele tratarse de territorios amplios y más cercanos a los territorios continentales. En el caso del segundo y tercer grado, esto sería la doble y la triple insularidad, esas dificultades se doblan y se triplican porque, si hablamos de transporte de mercancías, debe pasar primero por la isla más grande, luego por la siguiente para terminar, al fin, en la tercera. Esto encarece el transporte y dificulta las comunicaciones.
¿En qué islas se da la triple insularidad?
Si hablamos del territorio español encontramos ejemplos de este tipo tanto en el archipiélago balear como canario:
- Formentera en Baleares.
- La Gomera, el Hierro y La Graciosa en Canarias.
El transporte marítimo en territorios isleños
El transporte marítimo de mercancías en temporada turística no se encuentra con muchas barreras. Eso sí, el incremento de los costes por el tiempo y la dificultad añadida de llegar a esos puertos repercute directamente en los precios de los productos.
En cuanto al transporte fuera de la temporada turística se encuentra con más dificultades para los empresarios de este sector, ya que se pierden muchas de las conexiones directas que se abren durante el verano. Sigue siendo una de las principales reivindicaciones, tanto de transportistas como de, claro está, habitantes de estos territorios.